sábado, 27 de julio de 2013


Andragogía


El estudio de la andragogía nace a partir de la necesidad de encontrar  los métodos y técnicas de enseñanza para los adultos, ya que su manera de aprender es distinta a la de los niños; sus objetivos y metas son diferentes.




Si bien es cierto, la experiencia de vida es un elemento primordial en el proceso de enseñanza-aprendizaje en adultos, pues en ellos se requiere la utilización próxima de los recursos teóricos así como la aproximación sucesiva al ámbito laboral o real. Por lo tanto, es de suma importancia apropiarse más rápidamente de los conceptos y procesos específicos de la temática en curso.

Palabras claves: andragogia, pedagogía, educación, adultos, enseñanza activa.

 “Andragogía es la ciencia y el arte que, siendo parte de la Antropología y estando inmersa en la educación permanente, se desarrolla a través de una praxis fundamentada en los principios de Participación y Horizontalidad; cuyo proceso, al ser orientado con características sinérgicas por el facilitador del aprendizaje, permite incrementar el pensamiento, la autogestión, la calidad de vida, y la creatividad del participante adulto, con el propósito de proporcionarle una oportunidad para que logre su auto-realización”[1]

El término se utilizó por primera vez en 1883 por el Alemán Alexander Kapp, estudioso de las ideas platónicas sobre la educación. En la época de los 60 se aplica el concepto en Europa y Estados Unidos para referirse a los métodos, técnicas, fines, y en general, a todo el currículum diseñado para llevar a cabo la educación integral en los adultos.




 A principio de los 70 es utilizado por Malcolm Knowles[2], considerado como el padre de la educación de los adultos. Introdujo la teoría como el arte y la ciencia de ayudar al aprendizaje  de los adultos. Consideraba que los adultos necesitan ser participantes activos en su propio proceso de aprender. Knowles (1970) manifestaba que “los adultos aprenden de manera diferente a los niños y que los entrenadores deberían utilizar un proceso diferente  para facilitarlo”.

Al hablar de Andragogía, para diferenciarla de la Pedagogía, esta se basa en la distinción de los propósitos, fines, formas de atención, tipos de materiales y formas de evaluación de sus aprendizajes. Algo muy importante dentro de la Andragogía es que se debe tomar en cuenta las características bio-psico sociales de cada individuo, sus experiencias anteriores, presentes; futuras. Para John Dewey[3], (1983) “toda auténtica educación se efectúa mediante la experiencia”.

Su metodología de la enseñanza centra su interés en el adulto, como un ente responsable, autogestor de su proceso de aprendizaje y comprometido consigo mismo.

Consta de seis principios básicos: 1. la necesidad de conocer al alumno; 2. el concepto personal del alumno; 3. su experiencia previa; 4. su disposición para aprender; 5. su inclinación al aprendizaje, y 6. su motivación para aprender.

Dentro de la Andragogía el docente es considerado como un facilitador, el cual se encarga de orientar, ayudar, y cooperar con el estudiante para llegar a alcanzar sus metas de aprendizaje. Promueve la reflexión, imaginación y creatividad. Mantiene una relación horizontal, de actitud proactiva, recíproca y de compromiso hacia los logros.




Hoy en día se cuenta con la metodología y recursos necesarios para poder obtener una mejor educación en niveles superiores ya que no se pueden aplicar las mismas estrategias en los adultos que en los niños como en la Pedagogía. Ernesto Yturralde[4] expresa: Andragogía es al adulto, como Pedagogía al niño”. Se puede ver que el ser humano es capaz de aprender a cualquier edad, ya que son seres incompletos y se van completando a lo largo de los años con sus vivencias personales.  Ya como adultos se sabe lo que se quiere y que metas se quieren  lograr, la escuela de la vida es que la da más herramientas para salir adelante y se pueden utilizar dentro del aula para poder desempeñarse mejor como estudiantes. Los adultos se motivan por la necesidad de seguir mejorando.

Se sabe que el facilitador y el estudiante tienen las mismas condiciones, ambos tienen amplios conocimientos y la capacidad de ser críticos, analíticos y comprensivos. Pueden participar sin ninguna complicación, se tiene conciencia de los deberes (responsabilidad), pueden debatir usando un criterio ya formado, tomando en cuenta que cada uno tiene la madurez suficiente para hacerlo. El enfrentarse a nuevos retos como adultos implica una sinergia de  esfuerzos centrados para lograr efectivamente la meta trazada.
                   


Referencias bibliográficas
Aguilar, M. (2011, diciembre) Revista Uruguaya de Cardiología. Andragogía, educación durante toda la vida, vol. 26, no 3. Extraído el 15 de noviembre, 2012, de http://www.scielo.edu.uy/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0797-00482011000300001&lng=es&nrm=iso

Caraballo, R. (2007). Red de revistas científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal. La andragogía en la educación superior, vol. 22, núm. 2. Extraído el 15 de noviembre, 2012 de http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=65822208

Fernández, N. (2001). Dirección de Educación Continua. Andragogía. Su ubicación en la educación continua. Extraído el 15 de noviembre, 2012 del sitio web de la Universidad Nacional Autónoma de México: http://www.unam.mx/redec y luego http://www.tuobra.unam.mx/publicadas/021123224856.html

Torres, F. Órgano de comunicación del CICESE. Andragogía, el aprendizaje en los adultos, 75. Extraído el 15 de noviembre, 2012 de http://gaceta.cicese.mx/ver.php?topico=articulos&ejemplar=75&id=152




[1] Alcalá, Adolfo (2010). La praxis andragógica en los adultos de edad avanzada
[2] Pedagogo estadounidense. Considerado el padre de la educación para adultos y uno de los mayores defensores de la andragogía.
[3] Filósofo, pedagogo y psicólogo estadounidense (1859-1952)
[4] Facilitador & Conferencista internacional. Conferencia Andragogía… Educación del ser humano en la etapa adulta

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